Hay veces que perdemos algún cliente Comunidad de Propietarios o nos entra en el despacho alguna otra, normalmente gestionada por otro compañero Administrador de Fincas.
Formando parte del procedimiento de entrega, que se suele realizar en el despacho del Administrador de Fincas saliente, y dentro de la documentación de la Comunidad, se facilitan varios listados en papel con los propietarios, cuentas bancarias donde estén domiciliados los recibos de Comunidad, teléfonos, direcciones de correspondencia, emails, proveedores, etc.
Toda esta información está digitalmente almacenada en el programa que utilicemos para la gestión y salvo que usemos el mismo programa y éste tenga previsto alguna opción de exportación/importación de datos, tenemos que volver a teclearlos todos con la consiguiente pérdida de tiempo, así como posibles errores mecanográficos que puedan originarse.
Este tipo de procesos de intercambio de forma coordinada, mediante un formato común de ficheros, tuvo su origen a principios de los años 80 en la industria automovilística, para conectar los pedidos de la fábrica con la enorme variedad de proveedores y tipos de piezas que manejaban. Se le llamó INTERCAMBIO ELECTRÓNICO DE DATOS o más comúnmente conocido con el acronismo EDI de (Electronic Data Interchange).
En el sector bancario hasta principios de los años 80, el pago de recibos domiciliados en las entidades bancarias se realizaba a través de las CÁMARAS DE COMPENSACIÓN BANCARIA que eran lugares donde se contabilizaban y compensaban estos cheques y recibos que se manejaban manualmente en soporte físico papel (solía haber una Cámara por cada capital de provincia).
A partir de 1983 el Consejo Superior Bancario cuyas funciones a partir de 1994 fueron absorbidas por la Asociación Española de la Banca (AEB), comenzó a dictar una serie de NORMAS a las que llamó Cuadernos donde incluía información sobre la estructura y formato, los registros y campos que debían contener los ficheros para permitir el intercambio de esta información de una forma DIGITAL que fuera inteligible para los programas de las Entidades Bancarias y evitar así la manipulación de los recibos en papel.
Principales cuadernos del CONSEJO SUPERIOR BANCARIO.
19 – Adeudos por domiciliaciones en soporte magnético.
32 – Remesas efectos en fichero informático de clientes a Entidades.
34 – Órdenes en fichero para emisión de transferencias y cheques.
43 – Información normalizada de cuenta corriente.
57 – Cobros por ventanilla y autoservicio.
58 – Créditos mediante fichero informático para su anticipo y gestión.
60 – Recaudación de tributos y otros ingresos municipales.
En definitiva lo que quiero transmitir con este post es la conveniencia de que un Organismo, posiblemente el Consejo General Colegios Territoriales de Administradores de Fincas de España se reuniera con las distintas empresas que fabrican programas de Gestión de Comunidades de Propietarios y Administración de Fincas (Efincas, Gesfincas, Netfincas, TbZeus, TAAF, etc.) para determinar un FORMATO COMÚN de intercambio de datos entre los distintos programas de Gestión de Comunidades que facilite este proceso cuando suceda.
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Estoy muy de acuerdo. Leí este artículo hace tiempo y veo que aún sigue vigente. Los creadores de aplicaciones, por su propia iniciativa, permiten importar de los más difundidos. Pero no es suficiente. Hay muchos ámbitos en nuestra profesión que deberían normalizarse -«estándares»- como un Plan Contable sectorial, al igual que los hay para inmobiliarias y otras actividades; que los suministradores (eléctricas, etc),servicios públicos (Aytos., Hacienda,Registros, …) mejoren y faciliten nuestra labor como colaboradores en la gestión «multicliente», tanto personal como electrónica, …
Los propios Colegios Territoriales podrían crear y mantener una plataforma común para no estar aislandos entre sí, lo que repercutiría en la agilización de trámites y la difusión de asuntos de interés común para todos los colegiados.
Saludos,